Descubrir Marruecos es una experiencia inolvidable, y viajar de Tánger al desierto de Merzouga en 4 días es una de las rutas más fascinantes para explorar la diversidad cultural. Este recorrido combina el encanto del norte, los paisajes montañosos del Atlas y la magia del Sahara en un solo itinerario (Viaje 4 días Tánger desierto Merzouga).

Día 1: De Tánger a Chefchaouen

El viaje comienza en Tánger donde confluyen el Atlántico y el Mediterráneo. Tras una breve visita panorámica por  el Kasbah, la Medina Antigua y el Cabo Espartel, nos dirigimos hacia las montañas del Rif para alcanzar Chefchaouen.

Durante el trayecto, los paisajes cambian drásticamente: colinas verdes, olivares y pequeños pueblos acompañan el camino.

 Pasear por la Plaza Uta el-Hammam, visitar la Kasbah, o simplemente disfrutar del ambiente tranquilo, es una experiencia que enamora.

Por la noche, recomendamos cenar en un restaurante tradicional y degustar tajine de cordero con ciruelas o un cuscús artesanal.

Día 2: De Chefchaouen a Fez 

Tras el desayuno, la ruta continúa hacia Fez, una de las ciudades imperiales más antiguas de Marruecos. En el camino, hacemos una parada en Volubilis, el yacimiento romano mejor conservado del país. Las ruinas, con sus mosaicos y columnas, narran la historia de un pasado glorioso.

A pocos kilómetros, se encuentra Meknés, otra ciudad imperial que combina elegancia y poder. Visitamos la Puerta Bab Mansour, el Mausoleo de Moulay Ismail y los graneros reales, antes de continuar hacia Fez.

Al llegar, se puede disfrutar de una cena en un riad tradicional dentro de la Medina de Fez el-Bali.

Día 3: De Fez al Desierto de Merzouga 

El tercer día nos lleva desde la civilización urbana hasta los paisajes más salvajes del Sahara. Salimos temprano hacia el desierto de Merzouga, atravesando el Atlas Medio. En el camino, hacemos una parada en Ifrane.

A continuación, cruzamos los majestuosos bosques de cedros de Azrou, donde es común ver monos de Berbería en libertad.

Más adelante, el paisaje cambia radicalmente: montañas, valles y planicies áridas nos conducen hacia el Valle del Ziz, un oasis de palmeras.

Por la tarde, llegamos a Erfoud, famosa por sus fósiles y dátiles, y finalmente alcanzamos Merzouga, la puerta del desierto.

Aquí comienza la parte más mágica del viaje: una travesía en camello por las dunas de Erg Chebbi durante el atardecer.

La noche se pasa en un campamento de lujo, donde se disfruta de una cena tradicional bajo las estrellas, acompañada de música local y fuego de campamento.

Día 4: De Merzouga a Tánger 

El último día comienza temprano, con la oportunidad de ver el amanecer sobre las dunas, un espectáculo natural que deja huella. Después del desayuno, emprendemos el viaje de regreso hacia el norte.

La ruta pasa nuevamente por el Valle del Ziz y Midelt. Donde hacemos una pausa para almorzar antes de continuar hacia Fez y finalmente llegar a Tánger al anochecer.

 Los viajeros pueden aprovechar para  visitar mercados locales donde adquirir productos típicos como aceite de argán, artesanía o cerámica de Fez.

Lo que incluye este viaje de 4 días desde Tánger al Desierto de Merzouga

 Generalmente incluye:

• Transporte privado con conductor/guía de habla hispana.

• Alojamiento en riads tradicionales y campamentos de lujo.

• Desayunos y cenas incluidos durante todo el recorrido.

• Paseo en camello al atardecer y amanecer en Merzouga.

• Tiempo libre para explorar Chefchaouen, Fez y las dunas del Sahara.

Una experiencia que conecta culturas y paisajes

El viaje de 4 días desde Tánger al desierto de Merzouga es una ruta turística y un encuentro con la historia, la naturaleza y la diversidad marroquí.

En pocos días, se pasa del azul de Chefchaouen al dorado del Sahara, de la arquitectura romana de Volubilis a la espiritualidad de Fez.